Colombia enfrenta la posibilidad de perder la sede de los Juegos Panamericanos 2027 debido a una serie de circunstancias que han surgido en torno a la falta de comunicación entre el presidente Gustavo Petro y Panam Sports, la organización encargada de asignar las sedes de los juegos. Aunque Petro había expresado públicamente su compromiso con el país y su intención de viajar a Chile para asegurar que Barranquilla retuviera la realización de las justas, esto no se materializó.
Según declaraciones de Panam Sports, el presidente Petro nunca solicitó una reunión con el presidente de la organización, Neven Ilic. Esta falta de contacto directo ha generado interrogantes sobre el compromiso real de Colombia con la organización de los Juegos Panamericanos. Además, se cuestiona si el cambio repentino en la agenda del presidente Petro, atribuido a la alerta de incendios forestales en el país, fue el único motivo detrás de la falta de gestión para la reunión.
La situación se complica aún más con la revelación de panelistas de Blu Radio, quienes afirman que, según sus investigaciones, la reunión con Panam Sports nunca fue solicitada por parte del presidente Petro. Esto contradice la versión oficial dada por la Casa de Nariño, que había afirmado que la cancelación de varios compromisos se debió a la crisis de incendios forestales.
Esta serie de eventos ha generado incertidumbre y preocupación en torno a la candidatura de Colombia para albergar los Juegos Panamericanos 2027. La falta de comunicación y claridad en la gestión por parte de las autoridades colombianas podría tener consecuencias significativas para el país en términos de oportunidades deportivas y económicas.