El presidente colombiano, Gustavo Petro, ha reafirmado su posición respecto a la controvertida reforma de salud que su gobierno presentó al Congreso de la República hace un año. En un mensaje extenso difundido en la mañana del lunes 19 de febrero a través de su cuenta de redes sociales, el mandatario expresó su preocupación por lo que él considera como el fracaso del sistema de salud colombiano.
En sus declaraciones, Petro criticó duramente el modelo actual de intermediación privada de recursos públicos, que según él, ha permitido que las Empresas Promotoras de Salud (EPS) se enriquezcan mientras descuidan la atención en la red pública hospitalaria. Destacó especialmente la deuda acumulada de 25 billones de pesos, así como el presunto desvío de recursos públicos hacia lujos y armamento.
El presidente hizo hincapié en que su propuesta de reforma busca remediar esta situación, enfocándose en fortalecer el sistema de salud pública y garantizar una atención adecuada para todos los colombianos. Sin embargo, esta iniciativa ha generado un intenso debate en el Senado, donde está pendiente de iniciar su tercer debate en la Comisión VII.
La postura de Petro ha generado reacciones encontradas en la sociedad colombiana y en la clase política. Mientras algunos apoyan sus esfuerzos por reformar un sistema que consideran profundamente deficiente, otros cuestionan la viabilidad y los posibles efectos de sus propuestas.
En resumen, la defensa de Gustavo Petro sobre su reforma de salud refleja la urgencia y la complejidad de los desafíos que enfrenta el sistema de salud en Colombia, y subraya la necesidad de encontrar soluciones efectivas que garanticen el acceso equitativo y la calidad de la atención médica para todos los ciudadanos.
