China alcanzó un hito al lanzar con éxito el cohete Gravity 1 desde un buque frente a Shandong. Este cohete, propulsado por sólidos, se destaca como el más potente del mundo.
Con tres satélites de monitoreo terrestre a bordo, se colocaron en órbita solar sincrónica, demostrando la avanzada capacidad espacial de China y su enfoque innovador en los lanzamientos desde el mar.
Este logro refuerza la posición de China en la exploración y tecnología espacial, marcando un paso significativo en su programa espacial.