En una impactante rueda de prensa, el exalcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, ha expuesto una serie de presuntas prácticas corruptas que habrían tenido lugar en Empresas Públicas de Medellín (EPM) y sus filiales durante la gestión de su sucesor, Daniel Quintero. Gutiérrez, quien se ha mantenido activo en la escena política y social de la ciudad, ha desvelado detalles preocupantes sobre cómo se habría manipulado el proceso de contratación y dirección de recursos públicos en beneficio de intereses particulares.
Entre las acusaciones más graves se encuentran las relacionadas con la entrega de la gerencia de Afinia, una de las filiales de EPM, con el presunto objetivo de direccionar contrataciones hacia empresas en la costa Caribe a cambio de coimas. Estas revelaciones han levantado una ola de indignación en la ciudadanía, que ve en la corrupción un obstáculo para el desarrollo equitativo y sostenible de la región.
Gutiérrez no solo ha presentado testimonios de empleados de EPM que alertaron sobre estas prácticas ilegales, sino que también ha mencionado la existencia de un testigo clave que habría presenciado reuniones donde se pactaron acuerdos corruptos en diferentes lugares de Medellín y Barranquilla. Además, se han aportado pruebas documentales, como conversaciones de WhatsApp y registros de encuentros, que respaldan estas acusaciones y que ya están en manos de la Fiscalía para su investigación.
Este escándalo no solo pone en entredicho la integridad de la administración anterior de EPM, sino que también plantea serias dudas sobre la transparencia y la ética en la gestión de una de las empresas más importantes de Colombia. La ciudadanía espera una pronta y exhaustiva investigación para esclarecer estos hechos y garantizar que los responsables rindan cuentas ante la justicia.
